sábado, 4 de abril de 2015

Carta de paz.

Querido Julián Clouds: Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que hablamos, o que he podido verte a los ojos. Ha pasado tanto tiempo y me pregunto cuanto tiempo las personas normales se toman para olvidar, porque yo sigo intentando, con la única diferencia que al fin encontré paz. Últimamente soy muy feliz, no lo tengo todo, hago más de lo que soy físicamente capaz y sigo intentando conseguir la vida que quiero, pero me siento plenamente feliz de una manera tan sencilla cuando estoy pintando, escribiendo o tocando, simplemente sentado junto a la ventana. La vida es tan apresurada y ajetreada, por mucho tiempo me estresaron tantas responsabilidades y ahora ya no me preocupan, hago lo que tengo que hacer y estoy tranquilo. 

Me encuentro en mi habitación pintando un lienzo y la luz entra por la ventana de una manera tan gentil, así que abro las cortinas para sentir tanta magnificencia resplandeciendo frente a mí; hace un poco de calor y siento un poco de frescura; huele a comida casera y a perfume; siento una alegría sin igual, es como estar enamorado, y me doy cuenta que no estoy enamorado de nadie, simplemente es la vida, tan hermosa y sublime, que adoro en sus pequeños detalles que la hacen tan grande. 

Hace cuatro años que no me sentía así, amar profundamente, solo amar, amo la vida y simplemente amo. Entonces me pregunto por ti, y espero estés bien, me doy cuenta que ya no queda en mi ningún rencor ni pensamiento negativo sobre ti, se desvaneció mi furia, y me siento puro otra vez. Pienso que si alguna vez pudieras sentir lo que es la verdadera felicidad, serías una persona diferente, y deseo que seas feliz, todos lo merecen. Ojala supieras que en todos estos meses siempre me he preocupado por ti, ojala pudiera compartir contigo mi felicidad y pudiera curarte el daño que yo también te hice. 

Sé que no eres malo, sé que no es tu culpa, solamente estas triste, las situaciones que te han hecho daño te hicieron aprender a reaccionar de cierta forma, sé que si fueras feliz podrías ser un mejor hombre, sé que eres bueno en el interior, siempre lo vi, por eso me quedé y creo que sabes que lo noté, por eso hiciste lo imposible para convencerme de lo contrario.

 La razón porque te escribo esto, es porque estoy sorprendido, que en mi mejor momento en años, solo puedo pensar en ti, honestamente creí que te había olvidado hace dos intentos. Estoy en un estado de paz mental, y te recuerdo con tranquilidad y no puedo dejar de pensarte, pero no me molesta en absoluto porque se siente bien, ya veo cuanto te quise en realidad, pienso que nuestra historia fue grande y sé que no fue casi nada.

 Nuestra relación fue corta, inestable y desafiante pero aun así bella a su manera. No es posible saber exactamente lo que piensa el otro y lo que vemos en los demás es en realidad un reflejo de nosotros mismos, de alguna manera, bajo esa premisa me doy cuenta que era yo quien ocupaba cambiar, y entonces pienso que te debo una disculpa, Julián, aquel que conociste hace tiempo era un chico infeliz también, con un amor no correspondido y una necesidad de dar y recibir afecto, ese chico estaba loco y lo sigue estando, pero ahora es feliz, feliz en sí mismo y no busca su felicidad en los demás ni le adjudica una carga emocional tal a nadie ya. Perdóname, Julián, por haberte echado mis problemas emocionales encima. 

Quisiera que cuando nos encontremos ocasionalmente, pudiésemos ser más casuales [estoy consciente que eso también es mi culpa, y te pido perdón por eso] y si te parece bien me gustaría ser tu amigo. Me despido de ti, querido Julián Clouds, con un hasta pronto.

 Esta vez en paz, A. S.

miércoles, 18 de marzo de 2015

Hablemos de ti.

Siempre creí que mientras más alejado me mantuviese de las personas, el resultado sería menos agobiante, quise creer que a pesar de todas las cosas que ocurrían el mundo seguía siendo un buen lugar. Pero hablando enserio, siempre tuve esa sensación de asco y pesar cada vez que salía con personas, cada vez que me tocó tener relaciones íntimas con alguien la sensación nunca fue tan placentera al final. Hasta que conocí a Alejandro, sí, era un chico muy normal dentro de lo que se podría decir. Tenemos muchos gustos similares en música, nuestra sátira es bastante fluida.

Lo conocí hace 3 años, simplemente lo agregué en facebook, sin una razón en especifico, no lo pude conocer hasta después de 6 meses, en unas vacaciones que tuve para poder ir de vuelta a mi estado. Me gustó mucho conocerlo, solo charlamos por alrededor de 4 horas, sin parar, el fumaba conmigo sin remordimiento, era justo el tipo de chico que me empezaba a matar. En ese entonces yo solía meterme con muchas personas, no solo con hombres, varias mujeres pasaron también. Nunca lo vi a él como una posibilidad.

La segunda vez que lo vi fuimos a beber, era muy tarde, conocimos a una mujer llamada "Marisol". De solo escribirlo me divierte mucho, la mujer estaba totalmente ebria, aparentemente era prostituta, según nos contó. En cuanto nos vio declaró, que eramos novios, no sé como ni porqué, no estábamos tan cerca, y solo charlabamos, me alegré mucho.... me provocaron tantos nervios que me puse a bromear al respecto. Era tiempo de despedirnos, era tarde... El me dijo que en su casa estaría mejor, era muy "noche" para un taxi. Así fue, no estaba esperando que algo sucediera. Llegué a su cuarto, me quité mis botas, y estaba muy nervioso, no sabía que hacer, me sentía como un niño inocente atrapado. Escuchamos música, y charlamos de vez en vez hasta que fue momento de dormir. Ya a oscuras, me salió lo malvado, aunque estaba muy nervioso. El problema más común es que yo no denoto nervios, siempre estoy muy rígido, pero le advertí, "Te voy a besar". Para que el supiese si me iba a alejar, lo cual sería comprensible dadas las condiciones, de que el tenía novio. No lo hizo, pero tampoco pasó de unos besos y tomar manos antes de dormir. Estaba nervioso, era una de las primeras veces que me sentía de esa manera, con el corazón latiendo con fuerza, a pesar de lo que había hecho con tantos otros. Al día siguiente me acompañó al bus y se despidió al subirme, sabía que no podía esperar más, no sé si note algo por su parte en toda la charla, soy terrible descifrando lo que las personas piensan. Me tenía que regresar al estado donde estudiaba en 2 días, y ya no pude verle más.

De allí pasó mucho hasta la siguiente vez que le vi, alrededor de 1 año... Salimos, charlamos de lo más normal, y no pasó de allí, lo cual me pareció bueno, el parecía y demostraba ser un tanto más maduro de lo que fue un año atrás.

Para ese tiempo yo ya había regresado a mi estado a vivir, por otras razones. Eso fue hace ya casi 8 meses. Siempre he sido algo ocupado en mis actividades, y el también, por eso de finales de su carrera. Nos vimos bastante tiempo después, fuimos a tomar una cerveza, me la estaba pasando genial, sí lo extrañaba bastante, y quería verlo más seguido, pero a veces era imposible, aunque intentáramos quedar. Tuvimos una charla por chat, y yo saqué el tema de que, quería más de su parte, y el mencionó algo muy curioso, yo le solía gustar, pero el sintió que yo no me podría sentir de la misma forma que él, porque estaba fuera de su "rango". Como si ese chico tan esplendido mereciera chicos malos.  También dijo que yo no era "realmente" un santo, y qué, seguro tenía otros ligues, a lo cual le dije que no era cierto. Detuve lo de meterme con más personas hacía ya bastantes meses, porque solo podía pensar en él. Ya más tranquilos después de esas cervezas, yo no esperaba irme a su casa, en realidad estaba decidido ir a la mía, y el por su parte no parecía querer que yo fuera, porque a él le gustaba otro chico, que le gusta alguien distinto seguido, por cierto, ya ni sé si era el, quien tenía muchos ligues. Seguíamos charlando, y le dije, "Me gustas". Pero el solo atinó a decirme, "A mí alguien más". Como si se lo hubiese tomado a broma, hasta sonó con sorna cuando dijo eso. Me sentí un tanto alterado, no sabía que estaba pasando, tomar nunca se me dio bien y eso no lo ayudó. Quería decirle, que no le iba a esperar por siempre, pero el de verdad lo tomaría como broma de nuevo, como si yo no pudiese gustar de alguien realmente y de una forma sincera. (O algo así) Platicamos un tanto más, y le dije que me iría, caminamos un poco y prácticamente corrí a tomar un taxi. No supe que hacer.

Seguimos hablando un poco, y me dice en ocasiones, "Hay que vernos". Pero yo le he dicho, con toda sinceridad, "Sí no es una cita, no me sigas tratando así". Al muy cabrón, se le ocurrió decir, "Es que me gusta verte, pero no como en una cita". Pero, claro, excusando la idea de que, cuando nos vemos estamos muy cerca, nos tocamos las manos, y platicamos de cosas que no creo que le cuente a los demás, no entiendo como esas no fueron citas.

Nos veremos este fin de semana, no quise seguir poniendo excusas, y estoy totalmente decidido a dejar las cosas claras, a hacer que tome lo que siento por el o que lo deje de una buena vez por todas. No le puedo decir estas cosas por un simple chat, sí el no tiene los huevos de hablarlo, quién más si no yo.

Me gusta su cuerpo, no es un cuerpo de revista, pero me gusta que sea de mi misma estatura, me gusta su voz, me gusta su risa, también me gusta que me vea el culo - aunque eso me pone nervioso - porque ni lo disimula. Solo me causan agrado, me gusta que me diga que soy atractivo, y me gusta más su risa nerviosa cuando yo le hago cualquier comentario sucio directo.

Solo quisiera, de verdad quisiera, que supiera que no ha habido otro chico en mi vida en estos ultimos 8 meses más que él...


"Because despite all of this, the world is still beautiful"